Luego de muchísimo tiempo sin visitar a mi abuelita, llegue con muchas ganas de abrazarla. Pero siempre que la visito no puede faltar un detalle de ella. Esta vez me ha regalado unos accesorios que quería desde hace tiempo para la consola de videojuegos y mas tarde me regalo una buena follada que jamas en mi jodida vida olvidare. No estaba tan de acuerdo con el incesto pero luego de ver como ella empezó a besarme la polla, y mostrarme sus enormes senos. Esta señora que ahora desconozco se convirtió en una completa puta y no me resistí a follármela.